Pedro Eusebio hizo un breve recorrido por los datos que se encuentran registrados de la huerta de Herencia. A finales del s. XVIII se habla de 19 hortelanos que ya surtían de productos hortícolas a los pueblos de alrededor. La revolución en la horticultura en Herencia se produce en los últimos 40 años, con la introducción de la mecanización, los invernaderos y la modernización del riego entre otras prácticas. Pedro Eusebio considera que aunque se mantienen algunas de las peculiaridades de la huerta de Herencia, como la rotación de cultivos en la misma parcela, es posible que se esté perdiendo algo fundamental, el control sobre las semillas. Cada vez el hortelano depende más de la planta y semilla que se le suministra así como de las empresas químicas para el control de plagas y enfermedades, como está ocurriendo con la tuta absoluta en el tomate, plaga procedente de Sudamérica. Pedro Eusebio ha comprobado que afecta menos a las variedades autóctonas. Su propuesta es recuperar paulatinamente el sistema de los padres y abuelos compatibilizándolo con los nuevos sistemas. Ahora el consumidor quiere productos ecológicos, con los sabores naturales de siempre y el hortelano de Herencia del S. XXI debe ser el dueño del destino de su explotación y para eso debe poder intervenir en las variedades que se plantan y los tratamientos que se hacen.
Tras la introducción se hizo la presentación de José Francisco Romero Quiñones, titular de la empresa SÓCRATES HORTÍCOLA, S.L. dedica a la producción, comercialización, distribución y transformación de hortalizas y productos agroalimentarios en la vecina localidad de Camuñas (Toledo).
José Francisco se declaró discípulo de los hortelanos de Herencia, de ellos aprendió el arte de la horticultura herenciana hace más de 20 años. Empezó su actividad agraria en Camuñas, desde hace 7 años es agricultor ecológico y se ha especializado en monocultivos. Desde el aprecio a los hortelanos y a la peculiaridad de la huerta herencia hace una serie de propuestas que pueden mejorar la huerta herenciana actual:
1º.- Hacer una marca distintiva de la huerta de Herencia.
Puede ser una IGP (indicación Geográfica Protegida), bajo ese paraguas todos los hortelanos pueden desarrollar su actividad, aunque sigan siendo independientes. La IGP les dará prestigio.
2º.- Ir hacia una huerta ecológica.
Estas prácticas está comprobado que fortalecen las plantas y las hacen más resistentes a plagas y enfermedades.
José Francisco tuvo hace 7 años la intuición de que la agricultura debería evolucionar hacia los cultivos ecológicos. Las sociedades desarrolladas demandan productos que tengan la mayor seguridad alimentaria, así ocurre en los países del centro y norte de Europa. José Francisco Cree que el 80 % de la alimentación de los próximos años será vegetariana. El 1 de enero de 2011 se suspendieron el 70% de los productos fitosanitarios. El horizonte va hacia una agricultora ecológica porque así lo demanda la seguridad alimentaria y los consumidores. El producto ecológico aumenta el precio sobre el convencional entre un 15 y un 25 %. Además hay un componente que no cotiza en el mercado, pero que él considera muy importante: la satisfacción personal de ofrecer al consumidor un producto sano, libre totalmente de residuos químicos.
3º.- Potenciar el uso de semillas autóctonas y conservar todas las variedades que puedan. Ese es un tesoro que se debe cuidar.
4º.- Acudir a ferias nacionales e internacionales de agricultura integral y ecológica.
La próxima cita a la que invita a acudir a los hortelanos es a Biocultura que se celebrará en Madrid del 14 al 17 de noviembre. Puso también como referencia la feria alemana de Biofach a la que él lleva acudiendo varios años. Es importante estar presente en las diferentes ferias, cultivar los contactos empresariales. Para facilitar esa presencia se pueden aprovechar los stands comunes que prepara la Junta de Comunidades de Castilla - La Mancha para estos eventos.
Terminó su exposición ofreciendo toda su experiencia a los hortelanos de Herencia.
A continuación hubo un interesante coloquio con los asistentes en el que se hizo evidente la necesidad de cambiar algunas de las prácticas actuales para hacer mas rentables y seguros los negocios hortícolas. La versatilidad de la huerta de Herencia y de sus productos y la tradición de más de trescientos años proporciona las claves para incorporar a sus explotaciones un valor añadido y distintivo de sus productos.
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